Dormir bien es una parte esencial de nuestra salud y bienestar. Para favorecer un sueño reparador es fundamental una buena higiene del sueño. La higiene del sueño engloba varios hábitos y factores ambientales que influyen positivamente en la calidad del sueño. En este artículo aprenderás qué significa la higiene del sueño, cómo mejorar tus hábitos de sueño y qué errores debes evitar para dormir mejor.

¿Qué es la higiene del sueño?

La higiene del sueño se refiere a los comportamientos y circunstancias que contribuyen a un sueño bueno y saludable. Esto incluye, entre otras cosas, horarios de sueño regulares, un ambiente agradable para dormir y la eliminación de factores perturbadores antes de acostarse. Una buena higiene del sueño ayuda a establecer un ritmo estable de sueño-vigilia y a evitar trastornos del sueño. Si presta atención a una higiene del sueño constante, podrá mejorar significativamente la calidad de su sueño y empezar el día más descansado.

Elementos de una buena higiene del sueño

Para una buena higiene del sueño es necesario prestar atención a algunos elementos fundamentales. Esto incluye acostarse y levantarse a la misma hora todos los días, incluso los fines de semana. Tu dormitorio debe ser oscuro, tranquilo y fresco, ya que estas son las condiciones ideales para un sueño reparador. Evite mirar televisión o trabajar en la cama para que su cerebro sólo asocie la cama con el sueño y la relajación. Si tiene problemas para relajarse, los productos de CBD pueden resultar útiles como ayuda para dormir.

¿Qué es la mala higiene del sueño?

Una mala higiene del sueño puede manifestarse a través de diversos hábitos y circunstancias que afectan negativamente al sueño. Esto incluye horarios de sueño irregulares, pasar demasiado tiempo frente a las pantallas antes de acostarse y consumir cafeína o alcohol por la noche. Un entorno para dormir inquieto o incómodo también puede afectar significativamente la calidad del sueño. Despertarse con frecuencia por la noche o permanecer despierto durante mucho tiempo antes de conciliar el sueño son signos típicos de que es necesario mejorar la higiene del sueño.

Impacto de la mala higiene del sueño en la salud

Una mala higiene del sueño puede provocar varios problemas de salud. Pueden producirse alteraciones del sueño, como insomnio o sueño intranquilo, que a menudo tienen efectos considerables sobre el bienestar y el rendimiento. Las personas con una mala higiene del sueño tienden a sentirse cansadas y desconcentradas durante el día, lo que afecta su productividad y aumenta el riesgo de accidentes. A largo plazo, la falta de un sueño reparador también puede debilitar el sistema inmunológico y aumentar el riesgo de enfermedades crónicas como diabetes o hipertensión. Puede encontrar más información sobre el vínculo entre la mala higiene del sueño y las alteraciones del sueño en este artículo sobre los problemas del sueño REM.

¿Cómo mejorar la higiene del sueño?

Existen muchas formas sencillas de mejorar la higiene del sueño y aumentar la calidad del sueño. Una de las medidas más efectivas es establecer una rutina nocturna relajante. Esto incluye actividades como leer, tomar un baño tibio o hacer ejercicios ligeros de estiramiento que preparen el cuerpo para dormir. Evite las comidas copiosas y las bebidas con cafeína por la noche para evitar sobrecargar la digestión y alterar el sueño. Otro aspecto importante es la reducción del estrés mediante técnicas como la meditación o ejercicios de respiración, que pueden ayudar a calmar la mente y relajar el cuerpo.

Optimización del entorno para dormir.

Un entorno propicio para dormir juega un papel vital en la higiene del sueño. Tu dormitorio debe ser oscuro, tranquilo y fresco, con una temperatura entre 16 y 18 grados centígrados, que se considera ideal para dormir. Utilice cortinas opacas para eliminar las fuentes de luz y utilice tapones para los oídos o una máquina de ruido blanco para minimizar los ruidos que distraigan. Elegir el colchón y las almohadas adecuadas también puede contribuir significativamente a lograr un sueño más confortable y reparador. Invierta en equipos para dormir adaptados a sus necesidades y preferencias personales para crear las mejores condiciones posibles para un sueño reparador.

Errores comunes en la higiene del sueño y cómo evitarlos

Evite la cafeína y el alcohol por la noche.

La cafeína y el alcohol son dos de los perturbadores más comunes de una buena higiene del sueño. Aunque la cafeína es un estimulante conocido que aumenta el estado de alerta y puede retrasar el sueño, el alcohol también puede interferir con el sueño al alterar los patrones de sueño y provocar despertares frecuentes. Por tanto, es aconsejable evitar bebidas con cafeína como café, té o refrescos de cola por la tarde y por la noche. Además, no debes utilizar alcohol como pastilla para dormir, ya que deteriora la calidad del sueño. Opte por bebidas que induzcan el sueño, como tés relajantes o leche caliente.

El uso adecuado de las pantallas y la tecnología

Las pantallas y dispositivos electrónicos como smartphones, tablets o televisores emiten luz azul, que inhibe la producción de melatonina, una hormona que induce el sueño. Esto puede hacer que conciliar el sueño sea mucho más difícil. Para minimizar los efectos negativos de las pantallas, evita el uso de dispositivos electrónicos al menos una hora antes de acostarte. También puedes utilizar filtros de luz azul o activar el modo nocturno de tu dispositivo. En lugar de mirar pantallas, utilice su tiempo para realizar actividades relajantes que calmen su mente y preparen su cuerpo para dormir.

¿Cuándo se necesita ayuda profesional?

Problemas para dormir a pesar de una buena higiene del sueño

Si a pesar de una buena higiene del sueño todavía tienes dificultades para dormir, puede resultar útil buscar ayuda profesional. Un médico o especialista en sueño puede ayudarlo a identificar las causas de sus problemas de sueño y recomendarle pasos específicos para mejorarlo. Especialmente en casos de trastornos del sueño como insomnio, apnea del sueño o síndrome de piernas inquietas, se recomienda el asesoramiento de expertos para encontrar soluciones a largo plazo y mejorar la calidad del sueño.

Higiene del sueño en trastornos específicos del sueño.

Para personas con trastornos específicos del sueño, existen recomendaciones adicionales para adaptar la higiene del sueño. En casos de insomnio, por ejemplo, puede resultar útil mantener un horario regular para acostarse y utilizar técnicas de relajación para favorecer el proceso de conciliación del sueño. Si tiene apnea del sueño, es importante prestar atención a una posición saludable para dormir e incorporar posibles ayudas respiratorias, como una máscara CPAP, a su rutina nocturna. Para obtener más información y consejos sobre la higiene del sueño en diferentes trastornos del sueño, puede ser útil una visita a un médico del sueño o un especialista en sueño.

Conclusión

Una buena higiene del sueño es esencial para un sueño saludable y reparador. Al optimizar sus hábitos de sueño y crear un entorno propicio para dormir, puede mejorar enormemente la calidad de su sueño. Mantenga un horario de sueño regular, evite factores perturbadores como la cafeína, el alcohol y las pantallas, y utilice técnicas de relajación para facilitar la transición al sueño. Si tus problemas de sueño persisten a pesar de una buena higiene del sueño, no dudes en buscar ayuda profesional. Con las medidas adecuadas y un poco de paciencia, podrás mejorar de forma sostenible la calidad de tu sueño y empezar el día más descansado.